El jurado destaca en su acta que Miyamoto "es el principal artífice de la revolución del videojuego didáctico, formativo y constructivo". Además, que es "diseñador de personajes y juegos mundialmente conocidos y se caracteriza por excluir de sus creaciones la violencia y por innovar con programas y formatos que ayudan a ejercitar la mente en sus múltiples facetas y resultan muy valiosos desde un punto de vista educativo".
"Miyamoto no solo es el padre del videojuego moderno, sino que ha conseguido, con su gran imaginación, crear sueños virtuales para que millones de personas de todas las edades interactúen, generando nuevas formas de comunicación y de relación, capaces de traspasar fronteras ideológicas, étnicas y geográficas".
El creador de franquicias como Mario Bros, The legend of Zelda y Donkey Kong, aterrizó en Nintendo en 1977 con la carrera de Arquitectura recién terminada, su padre era amigo del presidente de la compañía, Hishi Yamauchi, que rápidamente le procuró un hueco como artista. Tras unos años, la compañía le encargó diseñar una máquina arcade (de monedas) centrada en el personaje de Popeye para el mercado estadounidense, pero un problema con los derechos terminó con el proyecto. Con todo Miyamoto, ya había ideado una fórmula rompedora: un hombre bajito y posteriormente bigotudo que trataba de salvar una chica de las garras de Donkey Kong. Pese a los recelos iniciales, la recreativa rompió obtuvo un éxito sin igual.
Desde su creación, Mario Bros. ha vendido 240 millones de videojuegos y se ha convertido en un icono planetario. Una encuesta de 1987 ya situó a Mario como el personaje de ficción más popular para los niños estadounidenses, por delante de Mickey Mouse. Pero Mario es mucho más: fue el primer personaje en desplazarse libremente por la pantalla (1980), el primero que introdujo el desplazamiento lateral de la cámara (1987) y el primero en moverse en un entorno tridimensional (1993). La obra de Miyamoto está considerada como la más decisiva de su disciplina. Según Gamerankings, cuatro de los cinco mejores juegos de la historia llevan su firma.
Como todos los grandes visionarios, la inspiración Miyamoto no surge de la nada sino de su entorno más cercano. Así, se fijó en los bosques que rodeaban su casa y cuyas grutas fueron escenario de sus juegos infantiles para crear la saga Zelda, uno de los juegos más laureados en la historia del sector. El mismo método sirvió para ir incorporando en los casi 200 videojuegos que ha creado elementos de la narración cinematográfica: el travelling, el uso de planos, la música…
Shigeru Miyamoto - iDÉAME 2012