Tras 33 años como empleado de Microsoft, de los cuales 13 de ellos ejerciendo como presidente, Steve Ballmer ha anunciado que se retirará a lo largo del próximo año, lo que ha derivado en una subida del 8% en las acciones de la compañía, aunque contrariamente a las primeras reacciones de los mercados, los analistas aseguran que la compañía tendrá que afrontar una situación complicada con la transición y el nombramiento de un nuevo presidente para la multinacional, la cual ya ha formado un comité especial para elegir al sucesor de Ballmer. Bill Gates, fundador de Microsoft, es parte de dicho grupo, el cual trabajará íntimamente con la firma Heidrick & Struggles International, una compañía dedicada a buscar los mejores perfiles para ocupar puestos ejecutivos.
"Nunca hay un momento perfecto para este tipo de transición, pero éste es el correcto," explicó Ballmer. "Nos hemos embarcado en una nueva estrategia con una nueva organización y tenemos una cúpula de liderazgo asombrosa.", explicó. "Como miembro del comité de sucesión, trabajaré de cerca con otros miembros de la junta para nombrar un nuevo director general," explicó Bill Gates. "Somos afortunados por tener a Steve trabajando en su posición hasta que el nuevo director asuma sus responsabilidades." añadió.
