Fatalidad, brutalidad y piedad en un Kombate Mortal

‘Mortal Kombat 11’ recoge bien el testigo de su predecesor, que, parece, sentó las bases para este título. Así, volvemos a encontrarnos con una estructura de combates clásica, al que se le añaden los diferentes ingredientes de la franquicia para hacerla mucho más mortal. Empezando lo básico, podemos decir que estamos ante un videojuego de lucha que ofrece combates uno contra uno con sus correspondientes guardias, contraataques y ataques especiales, sin demasiadas florituras y con mucha sangre por derramar.

Sin embargo, cualquiera que haya seguido la serie de cerca sabrá que esto que comentamos es lo mínimo exigible a cualquier exponente del género. Así, a esto se le suman los míticos fatalities, una forma de humillación donde los desmembramientos, el gore y la sangre está a la orden del día; los brutalities, una versión descafeinada del anterior pero brutal a la hora de terminar con nuestro enemigo; y, los mercys, donde podremos dar un pequeño porcentaje de vida al contrario para darle una última oportunidad –o terminar de humillarlo completamente-

Con esto en mente, podemos hacernos una idea de las capas de profundidad que ofrece cada combate que disputemos. Cada pelea es un mundo, pues cuando tengamos poca vida podemos darle la vuelta a la tortilla sangrienta con un Fatal Blow, un ataque poderosísimo que sólo puede utilizarse una vez por combate; o activar potenciadores ofensivos o defensivos que van rellenándose paulatinamente. ‘Mortal Kombat 11’ se hace un poquito más técnico y táctico, por lo que los jugadores que piensen que aporreando botones a diestro y siniestro tienen alguna oportunidad ya pueden ir buscándose otro título.

De hecho, la paciencia del jugador es un concepto muy a tener en cuenta, ya que si es la primera vez que jugamos a un título de la franquicia, veremos como la cantidad incesante de tutoriales que nos brinda la obra –cada personaje tiene su propio tutorial, set de movimientos, ataques que podremos cambiar, etcétera- puede dejarnos aturdidos durante unos instantes. En este sentido, con paciencia y calma podremos convertirnos, poco a poco, en maestros de nuestros personajes favoritos.

Y es que se nota mucho que el título viene del mismo estudio que hizo la aclamada y exitosa serie ‘Injustice’, al menos, en cuanto a personalización de personajes se refiere. Y no nos referimos exclusivamente al nivel estético, sino que también podremos editar y conformar nuestro luchador con los movimientos, ataques especiales y fatalities que más nos gusten, y que, por supuesto, habrá que ir desbloqueando a medida que vamos progresando en los diferentes modos de juego, que, advertimos desde ya, son bastante completos.

Guantazos para todos los gustos

Por regla general, un videojuego de lucha no suele contar con una trama argumental demasiado trabajada. Salvo algunas excepciones, las motivaciones de los luchadores suelen ser bastante básicas y superficiales, ideales para no cargar demasiado al jugador y hacer que los combates sean rápidos y efectivos. En este punto, debemos decir que, en esta ocasión, ‘Mortal Kombat 11’ hace un esfuerzo titánico no sólo por construir una historia a la altura del título predecesor, sino que, además, recoge conceptos vistos de las películas más taquilleras del momento para crear un arco argumental que encantará a los seguidores de la serie.

En esencia, y tras el final de ‘Mortal Kombat X’, vemos como una nueva diosa encargada del tiempo, Kronika, comienza a doblegar el tiempo y a hacer de las suyas para formalizar un nuevo orden. El giro de guion permite que luchadores idénticos –pero de otras eras- se encuentren, así como versiones alternativas que han pasado al lado oscuro, etcétera. Todo al servicio de los fans con unas secuencias cinemáticas que, en más de una ocasión, nos han dejado con la boca abierta.

Por otra parte, tenemos un clásico de la franquicia: las torres. Funcionando como una especie de modo arcade, tendremos que ir superando combates para llegar a los niveles superiores. Algunas de estas torres están modificadas, y necesitaremos cumplir una serie de requisitos para avanzar, y también tenemos la de supervivencia, que durará hasta que terminen con nuestra barra de vitalidad.

Otra de las novedades es el modo Kripta, donde jugaremos como si de un videojuego de aventuras en tercera persona se tratara. En esta Kripta encarnaremos a un luchador y tendremos que resolver una serie de acertijos y combates para poder ir desbloqueando todo el contenido que presenta la obra. Utilizando el dinero obtenido de las peleas, abriremos cofres donde encontraremos apariencias de cada luchador, fatalities alternativos, elementos cosméticos o bocetos de arte y desarrollo. Todo el contenido desbloqueable se encuentra aquí, y, creednos, si queréis haceros con el 100% de las posibilidades nos esperan horas y horas de juego.

Para complementar, nos encontramos con los típicos modos de juego de siempre: los torneos, combates contra la máquina, sus vertientes en línea –donde, advertimos, ya hay un buen nivel-, y el completísimo modo entrenamiento, donde poder entrenar y perfilar nuestros personajes y las diferentes variaciones que hayamos hecho.

Sangre y vísceras en alta definición

A nivel audiovisual, ‘Mortal Kombat 11’ funciona a unos rocosos 60 cuadros por segundo, sin ningún tipo de ralentización y con una serie de movimientos de cámara que impactan en la retina del jugador. Ver desmembramientos a pantalla completa, o cómo un luchador juega con la cabeza de su adversario, todo, absolutamente todo, con muchísimo detalle, hace que la experiencia sea grotesca y repulsiva a partes iguales.

El modelado de los personajes, así como los escenarios y, sobre todo, las secuencias cinemáticas, están a un muy buen nivel. Si bien es cierto hay algunos momentos en los que se notan las costuras al Unreal Engine 3, en conjunto ‘Mortal Kombat 11’ orece una experiencia audiovisual sobresaliente.

La música, por su parte, cumple perfectamente su función, aunque se han reciclado partes de la anterior entrega. El doblaje de los luchadores y luchadoras –en inglés, aunque con subtítulos en castellano- es más que correcto, y el narrador que espeta “FINISH HIM” continúa poniéndonos a tono de cara al siguiente combate.

Conclusiones

En definitiva, ‘Mortal Kombat 11’ es un videojuego de corte continuista, que recoge todo lo bien hecho en la anterior entrega y le añade algunas variaciones para hacerlo más completo y divertido. La plantilla inicial supera la veintena de luchadores, con alguna que otra sorpresilla, que, además, será ampliado mediante el contenido descargable. La jugabilidad se ha ajustado para hacer los combates más realistas y las grandes posibilidades de personalización aseguran un buen número de horas para aquellos quienes quieran controlar cada elemento al dedillo. En definitiva, un videojuego de lucha sobresaliente que encantará no sólo a los amantes del género, sino que también gustará a aquellos quienes buscan un buen reto.

Mortal Kombat 11 – Lanzamiento