El amor entre un pájaro y un pez

Cuando Sony presentó la patente de ‘Entwined’, rápidamente una corriente de jugadores apostaron que este sería uno de los grandes “Ases” de su catálogo de independientes como sucede con por ejemplo con ‘Journey’ o ‘flOw’. Pero es complejo asignar una categoría a ‘Entwined’ aunque cumple con todos los parámetros de la línea de juegos de avanzar sin fin, ya que el movimiento de los personajes únicamente se limita a los cambios de dirección sobre un plantilla circular. Con el stick izquierdo el jugador tomará el control del pez de color naranja, mientras que la palanca derecha sirve para controlar el pájaro azul.

El objetivo es sencillo: recoger el máximo número de ítems posibles relacionados con cada personaje. Esto está determinado por el color, naranja para los peces y azul para las aves. Las carreras contra el infinito están repletas de portales que los personajes deben atravesar en perfecta coordinación para seguir adelante. A medida que se van recorriendo metros y acertando con los obstáculos, los personajes se irán acercando hasta llegar a la unión física.

Controlar ambos personajes al mismo tiempo, al igual que sucede en ‘Brothers’ no es tarea demasiado complicada en los primeros tramos del juego, ya que una vez se recorren los primeros metros de cada etapa, aquí llamada vida, y se asimila el tempo en el cual se deben mover ambos personajes, la terea no pondrá las capacidades del jugador en demasiadas dificultades. Aunque ya rozando las fases finales, controlar el ave y el pez mientras los entornos psicodélicos de los escenarios ganan velocidad, puede resultar algo más complicado. Los lados del cerebro entran en disputa por alinear correctamente el pescado y el ave, mientras las secuencias de obstáculos irán realizando movimientos diferentes el uno del otro, básicamente es como en las pruebas psicotécnicas del carné de conducir pero con mucho más adorno. De modo que realizar movimientos sin controlar el tempo y la velocidad supondrá un fracaso tras otro.

Nueve vidas para estar cada vez más cerca

En la parte superior de la pantalla se muestra una barra para cada personaje que indica la distancia que resta a los animales para lograr la unión física, pero ambas deben estar equilibradas, de modo que si el pez ha tenido un tropiezo y no ha logrado superar un portal a tiempo, la barra del pez, es decir, la barra naranja, estará muy por debajo del pájaro azul. Aquí la misión del jugador será la de equilibrar el número de aciertos y pulsar los botones R1 y L1 para conectar espiritualmente a los animales. Desde el momento en que se conectan es necesario atravesar todas las secuencias de obstáculos para fundir pollo y pescado en un ser único, y de este modo completar la etapa. Finalmente, una vez combinados ambos personajes surge un nuevo animal, algo parecido a un ave fénix verde que podemos controlar en un escenario abierto.

La campaña se compone de nueve vidas - que en realidad representan nueve etapas - y cada una tiene un mundo único. En cada etapa el objetivo es recoger ítems brillantes para abrir el portal a la siguiente vida, pero aquí, a diferencia de los escenarios repletos de obstáculos, en los escenarios de mundo abierto, el jugador puede guiar el fénix verde donde quiera y el tiempo que quiera. Tanto que es lo único que ofrece, es la posibilidad de pasar el rato volando por los hermosos paisajes creados por la desarrolladora Pixelopus. Aunque por mucho paseo que el jugador quiera regalarse, y a pesar de unas etapas finales que representan un grado de dificultad más elevado, la experiencia se puede completar en menos de dos horas.

En este punto hay que destacar que el comportamiento más interesante del juego recae en un modo que añade cinco desafíos "infinitos" que se desbloquean en relación a las metas alcanzadas. El jugador dispone de tres vidas para tratar de llegar lo más lejos posible en una etapa sin fin con una secuencia de obstáculos que se intensifica a lo largo de su progresión.

Psicodelia de escritorio

A nivel técnico no se puede cuestionar el interés de la desarrolladora en mostrar un concepto artístico combinado sobre una notable banda sonora para crear un hermoso título. Sin embargo el juego tampoco sobrevive en su vertiente artística. Los psicodélicos escenarios parecen haber salido de un protector de pantalla de Windows. Los temas musicales en contraste no sólo complementan el juego, son fundamentales para intensificar la velocidad. Las etapas comienzan con temas tranquilos que se sustituyen por melodías de instrumentos electrónicos que mantienen el ritmo de los desafíos.

Conclusiones

Por mucho que ‘Entwined’ se esmere en ofrecer una inusual aventura romántica, el equipo de desarrollo se olvidó de explotarla como debía. No hay historia, nada es comprensible y no hay forma de involucrarse con ninguno de los dos personajes. A nivel jugable tampoco aporta ningún aliciente y tiene pocos desafíos. Tampoco se puede obviar que el trabajo de Pixelopus está bien hecho, pero su criatura a duras penas sobrevivirá y rápidamente pasará al olvido ahogada por su falta de contenido. Únicamente recomendado para jugadores que quieran conseguir una experiencia zen sin problemas.

Entwined - E3 2014 Trailer

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Carlos de Ayala