Dead Space 2

Analisis

Dead Space 2

Escrito por Elric Ruiz Domingo, 30 Enero 2011

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Cuando se lanzaba la entrega original de Dead Space en 2008, el género de los Survival Horror palidecía gracias a las reinvenciones y reciclajes de una fórmula que ya estaba agotada, presentada, planteada y ejecutada de mil y una formas diferentes en otras tantas producciones que dejaban poco espacio a la sorpresa; En estas Electronic Arts y Visceral Games irrumpieron para ofrecer a los jugadores una interesante y fresca propuesta tras la fructífera última hornada de juegos basados en zombis.

Aunque Dead Space recogió criticas formidables no fue un superventas al uso y en total contradicción con las leyes de la industria que dictan que si una nueva propiedad intelectual no genera suficientes beneficios no es posible plantear una secuela, EA aposto por Visceral Games y les brindó la oportunidad de continuar desarrollando en el inquietante universo que marca la historia de Isaac Clarke. Y así lo han hecho, ya que Dead Space 2 continúa y recoge fielmente los hechos acontecidos en el juego original de una manera brillante, sin estridencias, revolucionando sin dejarse notar y enamorando desde el primer minuto.

Jugabilidad

Dead Space 2 se basa en los mismos pilares que asentaron la base de la franquicia, ambientes opresivos, combates intensos, una dirección artística sobresaliente y mecánicas variadas, además de un argumento brillante. Esto a priori supone un problema a la hora de afrontar la producción de una secuela respetuosa y marcadamente continuista, ya que eliminado el factor sorpresa que nos acompañó en cada sala, pasillo o zona de Dead Space, el juego debe brillar a un nivel muy superior si no quiere decepcionar a los seguidores de la saga y a los nuevos interesados en las odiseas espaciales de Clarke. Y lo hace gracias a una inteligente y muy trabajada exposición de los hechos, un diseño artístico alternativo que no se aleja del formato que marcaba el original y que se encuentra en total concordancia con lo expuesto anteriormente, todo combinado con un excepcional y muy bien llevado argumento que engrandece tanto a nuestro protagonista, como a las mecánicas que deberemos hacer frente para completar la aventura.

Para comenzar, apuntar que en el menú de opciones contamos con un socorrido video en el cual se explican los acontecimientos sucedidos en la primera entrega además de mostrarnos el contexto general en el que se desarrolla, algo obligado no solo para aquellos que no jugaron la primera entrega, ya que viene muy bien para lograr la total inmersión del jugador en el planteamiento narrativo. De este modo el argumento nos traslada hasta la estación espacial Titan, una inmensa ciudad cercana a Saturno en la cual nos encontramos ingresados en un recinto psiquiátrico tras ser rescatados hace tres años de la cápsula con la que conseguimos salir de la órbita del USG Ishimura, escenario en el que se desarrolla la primera entrega de la franquicia.

Muy pronto nos damos cuenta que nuestro protagonista, Isaac Clarke, es un personaje más maduro, sabe que hacer frente a la terrible situación que vive la ciudad espacial, de hecho al poco de vernos libres por los primeros escenarios de la secuela se demuestra sobradamente, conoce al enemigo, ya lo derrotó en una ocasión y ahora está dispuesto a cualquier cosa para sobrevivir e intentar arreglar la situación, pero pronto nos encontraremos con el mayor enemigo de Isaac, el mismo, su propia mente, sus recuerdos, su amada Nicole y su demencia, eje argumental de la secuela.

Dead Space 2 es un juego de acción en tercera persona con vista de cámara en la parte trasera de nuestro protagonista con ligeros cambios de perspectiva cuando se apunta con el arma. Las mecánicas jugables son muy parecidas a los vistas en Dead Space, mientras que los sistemas de control y las habilidades se mantienen prácticamente invariables con respecto a la entrega original, un acierto bajo nuestro punto de vista, ya que el juego no necesitaba revolucionarse a sí mismo en sus planteamientos jugables, tan solo depurarlos, y así lo han hecho en Visceral Games, han afinado los sistemas hasta el extremo para brindarnos un control y un sistema de habilidades que no necesita ningún aditivo para resultar sumamente acertado.

En nuestra opresiva odisea espacial debemos luchar de nuevo contra los necromorfos, monstruosas variaciones genéticas muy resistentes al daño cuya única forma de eliminarlos es la amputación de extremidades, de este modo si un necroformo viene con intenciones hostiles hasta nosotros lo mejor es comenzar cercenando sus piernas para evitar que corra y terminar liquidándolo con la amputación de un brazo, todo lo demás no sirve y es un desperdicio de munición, elemento vital para que Isaac logre sus objetivos, ya que Dead Space 2 como su original no es un título en el que guste el disparo masivo a loco, siempre se debe actuar con máxima precaución y cautela a la espera de la emboscada.

Contamos con una mayor variedad de enemigos, como necromorfos que vomitan un ácido que nos daña, ralentiza y crea un desagradable efecto en nuestro traje, también hay enemigos especializados en embestir rápidamente, otros que guardan en su interior desagradables sorpresas, otros armados con brazos que contienen material explosivo sin olvidarnos de los más pequeños y farragosos, arañas, niños necroformos que saltan a nuestra espalda, reptadores que suben por paredes y se especializan en emboscarnos desde la retaguardia con sus tres tentáculos que lanzan proyectiles desde largas distancias, reptadores pequeños que contienen explosivos en sus lomos y como no, interesantes y desafiantes enemigos finales. Todo un festín de sangre, vísceras y desmembramientos aderezado con intervalos en los que tendremos que sobrevivir a emboscadas por sorpresa de todo tipo y algunos puzles de resolución no demasiado complicada. La curva de dificultad no es exponencial, ya que el objetivo de Visceral Games es hacer sentir al jugador vulnerable en todo momento y algo que consiguen con sobrada maestría.

También repiten las fases con gravedad cero, a las cuales se ha implementado un control del personaje mucho más cómodo y accesible al presentado en la primera parte. Estas fases son treméndamente espectaculares y se facturan de forma impecable aunque no sean especialmente novedosas en su planteamiento, además suelen ser preámbulo de acontecimientos importantes, fases muy bien planteadas ya que tras estas espectaculares secuencias el jugador se encuentra más motivado a la hora de afrontar retos más intensos.

Con respecto al arsenal, Visceral Games ha querido mantener la coherencia con la que se ha dotado al conjunto repitiendo el armamento de la primera entrega como elementos más determinantes, repiten la cortadora de plasma, la cortadora de sierra, el cañón lineal, el rifle de impulsos, el lanzallamas o el cañón de energía. Pero tampoco se han olvidado de implementar nuevos elementos para destrozar necroformos, ya que se ha añadido al arsenal otras armas como el cañón jabalina o el detonador que lanza minas a distancia.

El banco de mejoras y el inventario repiten en modo y forma en la secuela. Ambos elementos son vitales en el juego y su utilización determinará la solvencia con la que afrontemos los intensos combates que nos propone, ya que además de la escasa munición (cuanto mayor nivel de dificultad, menos munición y enemigos más duros), solo podemos equipar cuatro armas en nuestro inventario, aunque contamos con el almacén en el que podemos almacenar algunos elementos, armas y munición para utilizarlas cuando encontremos uno de los puestos de venta repartidos por el juego. El banco de mejoras de armas funciona mediante los mismos mecanismos que en la entrega original, es decir, estas mejoras se implementan mediante nodos de energía que encontramos en el juego o compramos en los puestos de venta de almacén del juego. De este modo el sistema DRI, el cual dota de prestaciones y brinda toda la información a nuestro personaje, el sistema de estabilización, una especia de tiempo bala y el módulo que nos aporta energía cinética, uno de los elementos que cobra más importancia en la secuela y el cual nos permite mover todo tipo de elementos para abrir nuevas vías y repelerlos para golpear a los enemigos, pueden ampliar su rango de daño y duración colocando estos nodos en los mapas que permiten entre otros mayor capacidad de almacenamiento en el traje, mas duración para el estabilizador o más potencia y mayor velocidad de recarga en la armas. Además a lo largo del desarrollo nos iremos encontrando con diferentes trajes que incluyen diferentes atributos. De este modo y dependiendo del estilo de cada jugador, se podrán adquirir varias armas que podremos intercambiar sin sobrepasar las cuatro en las tiendas del juego. Al matar necroformos se obtienen municiones, medicinas y créditos para canjear en la tienda. También contamos con algunas cajas, compartimentos o cuartos secretos donde se encuentran más ítems. Todos están equipados con pequeñas fuentes de luz para resaltar entre la oscuridad.

Gráficos

Ambientes opresivos y un excelente apartado gráfico y artístico nos permiten un nivel de inmersión pocas veces logrado con un videojuego. Para generar ese nivel de tensión único, el equipo de desarrollo ha combinado efectos de iluminación para dotar de más contraste al resto de zonas oscuras del juego, una constante en el diseño del juego. Esa sensación de vulnerabilidad se mantiene intacta durante toda la odisea espacial de Clarke, el cual va equipado con una linterna en el arma que se activa al apuntar. El diseño de los niveles es simplemente devastador y nos depara sensaciones de inquietud constantemente. En todo momento veremos en la espalda de Isaac el nivel de vida que le resta y la carga del estabilizador, además del tiempo de oxigeno restante en las misiones desarrolladas en el espacio exterior, además contamos con información relativa a la munición restante en el cargador sobre la parte superior del arma, elementos que repiten y que de nuevo se destacan como sumamente acertados.

Pero si hay que destacar algo sobre el apartado gráfico de Dead Space 2 es el estado de mejora general que ha sufrido. De los escenarios únicamente se rescata el estilo artístico visto en la USG Ishimura adaptándolo de forma magistral a una ciudad espacial con las características y el tamaño de la presentada en la secuela con todos sus matices y particularidades. Por su parte el nivel de detalle tanto de Isaac como de los necromorfos es muy elevado y cuentan con animaciones bien trabajadas y un notable acabado.

Audio/Sonido

Uno de los aspectos más aplaudidos en la entrega original era el sobresaliente soporte que brinda al juego el apartado sonoro, como apoyaba, ampliaba y en no pocas ocasiones nos brindaba sensaciones desorientadores con sus grandes silencios, nadie te oirá en el espacio, no se oye nada en el espacio, parecía repetirnos como un martillo neumático en la cabeza en la durante la primera entrega. Este planteamiento se repite en la secuela sin estridencias, sin sacar los pies del tiesto, combinando los angustiosos silencios con efectos de sonido que implementan el carácter de la secuencia justo cuando lo necesita, aportando momentos de tensión acordes con la situaciones que vivimos o a las que tendremos que enfrentarnos inmediatamente. Para finalizar con el apartado destacar el soberbio trabajo de doblaje en castellano, al igual que sus textos de pantalla.

Modos de juego

Además de la sobresaliente y rejugable campaña que incorpora Dead Space 2, una de las novedades más aireadas en la secuela es la incorporación de modos multijugador competitivos. Un añadido que va más allá de la excusa para ofrecer más contenido al peso para ofrecernos una serie de modos muy interesantes.

Los modos de juego se basan en dos rondas por partida, en una manejamos a humanos, mientas que en la siguiente nos toca ponernos en la piel de los necromorfos, estos últimos disponen de cuatro clases diferenciadas para escoger que podemos variar en el menú de espera cada vez que nos eliminen.

Contamos con cinco mapas con un objetivo central. Estos objetivos pasan por que los humanos tienen que recoger ciertos elementos o activar algunas zonas para ganar la ronda, la misión de los necroformos es la de evitar que los humanos acierten con los objetivos. El diseño de mapas está basado en los niveles de la campaña, aunque se han implementado para asegurar acción cuerpo a cuerpo rampas, pasillos estrechos y áreas abiertas de pequeñas dimensiones. Dependiendo de nuestro rendimiento se nos recompensa con puntos que nos ayudarán a subir de nivel y desbloquear más trajes, armas y habilidades. Otro punto interesante es el respawn, ya que mientras los humanos reaparecen lejos del grupo, los necroformos pueden elegir el lugar de reaparición situándose estratégicamente sobre las filas humanas, eso sí, estos no cuentan con periodo de invulnerabilidad al comenzar, lo que puede devolvernos a la sala de espera tras un solo segundo en el escenario.

Conclusiones

Trepidante desde el primer momento, opresivo hasta el nivel de provocar sensaciones de vulnerabilidad constantes en el jugador durante toda la aventura, ejemplar en su ejecución, mecánicas, gráficos, enemigos, planteamiento. Todo aderezado con un guion ejemplar y una argumentación digna de los más grandes de su género en Hollywood. No hay que darle más vueltas, Dead Space 2 se convierte enel mejor Survival Horror visto en consolas de nueva generación.

Dead Space 2 - Trailer de Lanzamiento

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Elric Ruiz