Los seguidores de la saga no deben preocuparse, pues Bungie ha sabido plasmar perfectamente el universo Halo visto desde una perspectiva lejana al que nos ofrece el juego dentro de la armadura del jefe maestro, ya que han sabido conservar las bases de los títulos anteriores conjugados con las novedades referidas a nuestro nuevo protagonista.

Jugabilidad

Halo 3: ODST incluye algunas novedades aunque conserva la jugabilidad básica en primera persona, excepto a bordo de vehículos o cuando nos hallemos en posesión de armamento pesado. Las diferencias las empezamos a encontrar con el protagonista, ya que en esta ocasión dejaremos descansar al jefe maestro y nos pondremos en la piel de Rookie, un soldado novato de los Orbital Drop Shock Troopers (ODST), grupo de elite y cuerpo de acción rápida de la UNSC. El grupo está formado por humanos que al contrario que los Spartan no poseen ningún tipo de mejora genética, ni adiestramiento especifico desde la infancia, tan solo son los primeros en llegar a los conflictos a través de HEV, cápsulas individuales de transporte que son lanzadas desde el espacio directamente a la primera línea de fuego de los conflictos, lo que les ha hecho ganarse el sobrenombre de Hell jumpers.

Los ODST no están equipados con las armaduras MJOLNIR que disponen de escudos recargables, ni radar, ni de la potencia de fuego de los Spartan, lo que nos lleva a un cambio de aires a la hora de afrontar la aventura.

La campaña nos lleva a lo acontecido en la cuidad de New Mombasa entre la segunda y tercera entrega de la saga, en la que los Covenant se apresuran a lanzar un gran ataque en la ciudad y donde deben actuar los ODST para frenar la ofensiva de los invasores. El escuadrón de la capitana Dare es enviado junto a otras tropas ODST al lugar del conflicto con la misión de frenar la ofensiva e invadir la nave de los Covenant que sobrevuela la cuidad. Durante la operación de descenso la nave es interceptada y los componentes del escuadrón aterrizan en distintas localizaciones de la ciudad.

Aquí es donde el novato del escuadrón entra en acción. El juego nos sitúa seis horas después del accidentado descenso a la tierra de Nueva Mombasa y nos pone en la piel del nuevo soldado de la unidad: Rookie, que debe emprender la búsqueda de sus compañeros con el fin de replegarse. La trama se nos presenta en Flashbacks en los que una vez que Rookie encuentre algún objeto o posesión personal de algún miembro del escuadrón pasaremos a controlar a este personaje dejando de lado a nuestro novato y nos desvelara la parte de la trama que corresponde al personaje, situada unas horas antes y una vez finalicemos con esta parte volveremos a controlar al personaje principal. La estructura es bastante lineal en este aspecto ya que se repite durante toda la aventura, aunque en algunos momentos podremos elegir el episodio que queramos revivir.

La acción directa en esta expansión es un argumento menos recomendable que en los anteriores títulos de la saga, ya que la menor potencia de fuego unido a la falta de la regeneración de escudos, la menor velocidad a la que nos movemos y la altura y distancia menor de los saltos, nos hace mucho más vulnerables y nos convierte en un blanco mucho más fácil. Los ODST cuentan con un visor que nos permitirá ver en una ciudad que esta prácticamente a oscuras y nos proporcionará información de lo que se encuentra en nuestro entorno. El visor perfilará las figuras de los aliados en color verde, los enemigos en rojo, los ítems y objetos en color amarillo y resulta determinante a la hora de afrontar como vamos a actuar en el área en la que nos encontremos, ya que reconocer el terreno y plantearse tácticas que nos permitan nivelar las situaciones en combate nos serán imprescindibles si queremos sobrevivir en las calles de Nueva Mombasa.

Contaremos con la ayuda del superintendente, una Inteligencia Artificial que controla las infraestructuras que quedan en la cuidad y nos ayudara a encontrar armas, objetos y pertenencias de nuestros compañeros que nos abrirán los Flashbacks que dan la estructura al guión.

El juego cambia el registro en cuanto al planteamiento jugable, pasando a una estructura abierta en la que podremos recorrer Nueva Mombasa de forma libre, con lo que Bungie se ha visto obligada a diseñar los escenarios más grandes vistos en la saga.

En cuanto a nuestros viejos conocidos los Covenant, no ha querido faltar a la cita casi ninguno, asi nos podemos encontrar con: Drones, Hunters, Brutes, Grunts, Jackals y un nuevo invitado. El ingeniero es un enemigo aéreo que ya aparece en las novelas y se encarga de reparar estructuras y dotar de escudos a los Covenant en combate, con lo que siempre que aparezca debe convertirse en el primer objetivo. La inteligencia Artificial es la misma que se mostro en la tercera entrega de la saga y aunque el titulo nos insta a la infiltración, en casi todas las situaciones seremos detectados demasiado rápido. Un punto negativo que encontramos es la activación de secuencias, ya que si activamos alguna secuencia proporcionada por algún objeto en mitad del combate este se dará por finalizado ya que los Covenant se olvidarán de ti como por arte de magia.

En cuanto al armamento contamos con la sub-ametralladora M7S con silenciador y mira telescópica, que resulta demoledora a corto alcance y bastante certera en distancias medias, y la Socom M6C, una pistola que se asemeja mucho a la que portábamos en el Halo original. Otra de las diferencias con el Jefe Maestro es la imposibilidad de portar dos armas de mano al tiempo. El resto de armas que encontraremos en las aéreas son las típicas de la saga como ametralladoras, lanzamisiles, lanzacohetes, láser Spartan, etc. excepto el lanzallamas y las espadas de plasma que portan los Elites, ya que no aparecen en el juego.

En cuanto a los vehículos también tendremos combates a bordo y no faltaran los carros blindados, el Scorpion y el Mongoose, como tampoco los vehículos Covenant como las Brutes, los Banshees, Ghosts o los Phantom.

Gráficos

Halo 3: ODST recoge el motor grafico de Halo 3 y lo implementa con un número de mejoras que no le hace resaltar con respecto a su aventura anterior. El resultado grafico queda algo alejado de lo ya demostrado por la blanca de Microsoft en otros títulos. A los modelados le faltan algo de detalle para un juego de esta factura, aunque han sabido contrarrestarlo con una ambientación y un diseño artístico sobresaliente. El uso de la iluminación y el juego de colores del que hace gala el motor en los escenarios y en las diferentes etapas temporales da mucha consistencia al apartado gráfico, ya que el título comienza en la oscura noche de Nueva Mombasa para llevarnos hasta el atardecer.  

Un elemento que si ha mejorado de forma sutil son las texturas, que en esta ocasión se ven reforzadas y presentan un aspecto mucho más consistente.

Audio/Sonido

La banda sonora es completamente nueva y no se han recuperado temas de títulos anteriores, lo que le da un total aire distintivo con respecto a las aventuras del Jefe Maestro. Martin O'Donnell, es el responsable de esta nueva banda sonora que se perfila simplemente como soberbia y acompaña a la perfección todas y cada una de las acciones que se desarrollan en la aventura, ya sea cuando estamos cogiendo cobertura o en los momentos más álgidos de los combates. Los efectos de sonido no difieren mucho de los visto en Halo 3 y cumplen sin demasiados excesos o estridencias. Como en el titulo anterior de la Saga el doblaje al castellano es correcto.

Modos

Con el permiso de la campaña principal, sin duda el mayor atractivo de ODST es el modo multijugador. Empezamos con la posibilidad de jugar la campaña hasta con tres personas más, lo que supone el aliciente de poder planear estrategias de ataque en los escenarios mas grandes. El nuevo modo Firefight se asemeja mucho al modo Horda de Gears Of War 2 aunque con diferencias. Básicamente tendremos que aguantar oleadas de enemigos que crecerán de número e intensidad según avancemos. Las rondas se componen de 5 oleadas tras las cuales dispondremos de un tiempo para recuperarnos y recoger munición. Tras la finalización de tres rondas se completará un Set. Ademas las vidas serán colectivas, con lo que un jugador individualista o poco experto en el grupo nos puede llevar a perder las vidas de forma fugaz.

Además contamos con los once mapas de Halo 3, los tres heroicos, los 3 mapas de leyenda, los tres míticos, el de estacionamiento frio y Citadel, Heretic y Longshore, los tres diseñados específicamente para ODST, lo que nos dan 24 mapas con un total de 9 modos que van desde el deathmatch pasando por los modos asalto, asesino o capturar la bandera.

Sin duda el mejor multijugador que podemos encontrar en Xbox 360 es el de Halo 3, una comunidad que mes tras mes sigue fiel al modo Online de Bungie alzándole hasta los primeros puestos de los Multijugadores mas jugados debido a lo adictivo de los modos y a la variedad que presenta, sin olvidar los rankings, las evoluciones y las características de personalización que encontramos para nuestro Spartan.

Conclusiones Finales

Halo 3: ODST es una gran expansión para un gran juego. El nuevo punto de vista que le ha dado Bungie a los jugadores con el conflicto de Nueva Mombasa y la aparición en forma jugable de los Orbital Drop Shock Troopers enriquece y desvela algunos detalles que quedaron sueltos entre la segunda y tercera entrega de la saga.

La calidad gráfica que ya cuando se lanzo Halo 3 no era la más potente de la blanca de Microsoft y sigue adoleciendo de los mismos fallos y virtudes, aunque en esta ocasión cuenta con una banda sonora que sin duda es un pedacito de la historia del ocio digital. La duración de la campaña que ronda las seis horas se ven compensadas con la cantidad infinita de tiempo y diversión que nos ofrecen todos los modos multijugador, desde la campaña cooperativa pasando por la gran cantidad de mapas y modos que se incluyen en el segundo disco que acompaña al lanzamiento.